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Resumen

A principios del siglo XX, cuando la merindad de Sangüesa atravesaba un momento verdaderamente delicado, un grupo de emprendedores, con el aezkoano Domingo Elizondo al frente, y al amparo de los trabajos de explotación forestal que llevaban a cabo en los valles del Pirineo navarro, impulsaron en esa merindad la puesta en marcha del primer ferrocarril de tracción eléctrica que circuló por la Península ibérica, y segundo en Europa. Hablamos del ferrocarril «El Irati», que entre los años 1911 y 1955 cubrió diariamente el trayecto Pamplona-Sangüesa. Además de ser un medio de transporte de viajeros y de mercancías, «El Irati» fue, sobre todo, una bocanada de aire fresco, de vida y de progreso, que volvió a llenar de futuro, durante unas décadas, a unos vecinos y a unos pueblos que perdían ya toda esperanza. Igual que ahora pudiera serlo, como Vía Verde, su antiguo trazado.

Año de publicación
2013
Editorial
Lamiñarra
ISBN-ISSN
978-84-616-4775-0
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